Yoko Ono y John Lennon conforman la pareja más representativa y controversial de los años 60. Enmarcados en el hippismo y en la beatlemanía, Yoko (artista plástica japonesa) y John se conocen en una galería de arte en Londres en 1966. A partir de ese momento, Yoko, de 33 años de edad, decide perseguir a Lennon, quien tenía 27 años y cuya fama como parte integral de los Beatles ya había transcendido las fronteras. En 1969 John y Yoko contraen matrimonio. Los primeros momentos de la pareja estuvieron marcados por una locura que llegó a su máxima expresión en la luna de miel, cuando la pareja se pasó 7 días acostada en la cama de la Suite Presidencial del Hotel Hilton en Ámsterdam recibiendo a periodistas y exponiendo su mensaje de paz mundial.
La intensa y pública relación de este par de excéntricos tuvo sus altos y sus bajos. Entre drogas, protestas, amor y peleas transcurrió el tiempo hasta que en 1973 John deja a Ono y se marcha con su joven y simpática secretaria May Pang. Yoko busca otros amantes pero intenta luego recobrar el amor de su esposo, con quien recomenzó la relación tildada por muchos como "teatral". En 1975, Yoko dio a luz a su único hijo con ella, después de un aborto, llamado Sean Taro Ono Lennon. Yoko se encargó de los negocios y John se convirtió en un "amo de casa", dispuesto a cuidar en todo momento a Sean, incluso abandonó su carrera musical. Sin embargo, una noche, al terminar de grabar con Yoko unas pistas, sobrevino la tragedia: Lennon murió asesinado el 8 de diciembre de 1980 en Nueva York, a manos de un fanático desequilibrado, Mark David Chapman.
Siempre se reconoció a Yoko Ono como una mujer talentosa, conociéndosele inclusive trabajos de artista de vanguardia y un libro que recibió muy buenas críticas; sin embargo, la enfermiza relación que los mantuvo juntos hasta la muerte de John desesperaba a propios y extraños, quienes veían en Yoko, a la mujer que cambió por completo a Lennon y lo condujo por caminos muy distintos a los que estaban acostumbrados a verlo.
John Lennon y Yoko Ono
28.1.09
Publicado por Aisha en 6:05
Etiquetas: John Lennon y Yoko Ono